martes, 28 de octubre de 2014

Redirigir los comportamientos


Situación: chica pasea con su perro. Lo lleva atado con correa. La chica es joven (20 años). El perro es un cachorrón de cruce de mastín.

El perro va a tirones. En un momento dado el cachorrón se fija en la correa y la muerde. Suelta y vuelve a morderla. Luego al talón de su dueña y luego al bolsillo lateral del pantalón. Son mordiscos de juego. A la dueña no le hace gracia. Le dice que no. El perro ni caso y vuelva a la carga al poco. La dueña más nerviosa para el paseo, se inclina sobre el perro, verbaliza que no haga eso y que así no puede seguir, y unos segundos más tarde le da dos cachetes (poco agresivos) y le vuelve a decir que no.  El cachorrón, ni caso y vuelve a la carga…y así sucesivamente por un buen rato.

Dos lecturas se me antojan a bote pronto en esta situación que observé hace unos días por la calle. Por un lado, ¿qué será de esta dueña cuando el cachorrón pase a mastin de más de 60 kilos?......qué importante es escoger un perro adecuado a cada dueño, por su forma de ser, carácter, tamaño, etc….muchas veces la gente acoge un cachorro por compromiso; se lo colocan; y lo que han hecho es meter una moto en su piso.

Por otro lado, ¿qué hubiera pasado si en vez de actuar como hizo, sin resultado positivo, hubiera redirigido la conducta a otra? Es decir, si le da algo para llevar en la boca o si le pide que se tumbe mientras ella mira un escaparate?....probablemte el perro hubiera depuesto su comportamiento al sustituirlo por otro.

Desde luego que cabrían más alternativas, pero me quiero centrar en la cuestión de redirigir los comportamientos.

Muchas veces nos empeñamos en que el perro deje de hacer algo. Pero el perro no lo entiende. Le parece lógico lo que hace y no entiende qué queremos que haga.  Es muy importante decir con claridad al perro qué queremos que haga.  Y eso sí lo entiende y sí lo hace 

miércoles, 22 de octubre de 2014

Si eres dueño, eres responsable


Todos sabemos que tener un perro es una responsabilidad.

Pero no somos conscientes muchas veces de que si la gente se queja de los perros y de los dueños desaprensivos es por nuestra culpa.

Si de verdad nos aplicásemos para tener , en unos mínimos, un perro educado, desaparecerían muchas quejas y mala fama que , con razón, se difunden por ahí.

Cuantas veces hemos visto dueños de perros que no saben controlar a su can. Cuantas veces hemos visto perros que se lanzan a perseguir a corredores, ciclistas, niños,  en una loca carrera de ladridos y excitación. Cuantas veces hemos visto que una persona se acerca a saludar a otra y el perro del visitado monta un pollo . Cuantas veces hemos visto perros que hacen sus necesidades  en cualquier lugar, en mitad de una calle peatonal concurridiísma de gente, aunque luego el dueño lo recoja. Y así podríamos seguir…

Todo esto hace que demos mal ejemplo. Todo esto hace que la gente tenga miedo o repulsa por los perros, y con razón muchas veces.

Lo mejor de todo es que se puede solucionar. Si de verdad los dueños se responsabilizan de su papel, se acaban los problemas, y el ir con perro no supone un peligro en absoluto. Así se podrá ir con perro a todas partes sin temor ni problemas con nadie.

Todo pasa por hacer del perro un buen ciudadano canino. Todo pasa por enseñar al perro unos mínimos: no subirse encima de las personas, callar a la orden, ir pendientes del amo, no perseguir niños ni ciclistas, estar bien socializados, acostumbrados a hacer sus deposiciones en parques y jardines y no en cualquier lugar...

Ya en algunos países se está trabajando en este sentido. Y se examina al conjunto dueño-perro para que haya compenetración y cumplan unos requisitos mínimos de civismo. 

domingo, 19 de octubre de 2014

10 Perros Propensos a Engordar

La obesidad es un problema cada vez mayor para todos los perros, pero algunas razas son más propensas a ganar más peso que otros, debido a la genética, tipo de cuerpo, o como resultado de otras dolencias comunes. Si la raza de su perro pertenece a esta lista, tenga cuidado extra para controlar su peso.

1. Beagle.

Los dueños de Beagles deben tener cuidado con la cantidad de comida que dan a sus perros. "Los beagles son muy entusiastas con la comida que se les ofrecen". Aparte de observar la ingesta de calorías de su beagle, asegúrese de darle suficiente ejercicio. Un revolcón y varios juegos en el parque o en una amplia zona de patio, junto a paseos regulares, son grandes actividades al aire libre para los beagles.

Junto con el aumento de peso, la raza es propensa a desarrollar lipomas, un tipo de tumor benigno, graso. Consulte a su veterinario acerca de cualquier bulto que pueda encontrar en su beagle para asegurar que no sea algo más serio.

2. Bulldog.

Los Bulldogs son comedores voraces, por lo que si son sobrealimentados, tienden a comer en exceso. También ganan peso rápidamente y fácilmente, por lo que un Bulldog sobrealimentado es probable que aumente de peso. Si usted es dueño de un Bulldog, el control y el seguimiento de su ingesta de alimentos es muy importante. Una vez que el Bulldog adquiera sobrepeso, es muy difícil que pierda sus kilos de más. Eso es porque esta raza no fueron creados para el ejercicio vigoroso. Su corto hocico dificulta la respiración, por lo que se agitan rápidamente.

3. Boxer.

Los Boxers suelen desarrollar hipotiroidismo, una deficiencia hormonal que con frecuencia conduce al aumento de peso. El hipertiroidismo puede desarrollarse en cualquier momento, así que los dueños del Boxer deben tener a sus perros analizados y revisados cada año, de acuerdo con expertos de la raza.
Si el Boxer ha ganado peso, pero no tiene hipotiroidismo, asegúrese de que no está siendo alimentado en exceso y que está haciendo suficiente ejercicio. El ejercicio físico y mental diario es esencial para esta raza, al cual también le encanta correr. Un largo paseo con correa o un buen trote es suficiente para satisfacer las necesidades de ejercicio de estos perros.

4. Dachshund.

Los Dachshunds tienen una tendencia a la pereza, y esta falta de actividad a menudo conduce a Dachshunds con sobrepeso. Este es un motivo de especial preocupación para esta raza, debido a que su forma del cuerpo ya lo deja propenso a problemas en la columna vertebral.

El exceso de peso puede aumentar fácilmente el riesgo de daño en la columna vertebral. Los Dachshunds necesitan hacer ejercicio todos los días. Los juegos físicos en el patio o en el parque y paseos diarios mantienen al Dachshund en su mejor forma.

5. Pastor Alemán.

Además de ser propensos al aumento de peso, los pastores alemanes son también comúnmente afectados por una serie de enfermedades, especialmente la displasia de codo y la displasia de cadera canina.

El aumento de peso puede acelerar o agravar estos problemas, por lo que los dueños del pastor alemán tiene una razón de más para mantener un ojo en el peso de su mascota. Ya sea que el Pastor Alemán tenga sobrepeso o no, este perro requiere un estilo de vida muy activo por su salud y su felicidad. Sesiones de entrenamiento o ejercicio frecuente son esenciales para mantener su mente y cuerpo activo.

6. Golden Retriever.

A pesar de ser relativamente perros grandes, tienden a disfrutar de un estilo de vida muy tranquilo en interiores. Es fácil imaginar a una familia con un Golden Retriever acurrucado en frente de una chimenea, o en los pies de su dueño en una cómoda sala de estar.

Pero no hay que exagerar con la comodidad y la rutina sedentaria del Golden Retriever. Es importante para esta raza mantener una rutina diaria de ejercicio o participar en juegos activos, de modo que pueda desaugar su energía natural y relajarse cómodamente durante horas.

7. Labrador Retriever.

El Labrador Retriever tiene una tendencia a subir de peso si es sedentario con demasiada frecuencia, o si se le da demasiadas golosinas. Un labrador saludable debe tener una forma de reloj de arena.

Aunque puede ser tentador ofrecerle golosinas a cambio de su afecto incondicional, es mucho mejor recompensarlo con un gran tiempo de juego en lugar de alimentos. El ejercicio regular es de suma importancia. El Labrador es un perro de alta energía que le encanta jugar, y se le debe dar la oportunidad de hacerlo a diario. Cuando sea posible, lleve a su Labrador a nadar, ya que es una de las actividades favoritas de esta raza.

8. Terranova.

Los perros de Terranova son bien conocidos por ser una raza gigante, normalmente tienen un peso de hasta 68kg. Debido a su gran tamaño y voraz apetito son propensos y fáciles de sobrealimentar.

También puede ser difícil darse cuenta cuando el cachorro empieza a inclinar la balanza más allá del límite saludable, porque es tan grande para empezar. Esas son malas noticias, ya que estos grandes perros ya están propensos a diversos problemas conjuntos y estructurales, por el cual el exceso de peso puede empeorar su condición. Para mantener al Terranova con el peso adecuado ofrézcalo ejercicio adecuado, pero no demasiado, para que no sobrecargargue y dañe sus articulaciones.

9. Pug.

Como los Bulldogs, los Pugs son típicamente comedores voraces, ya que son más pequeños que los Bulldogs, son más fáciles de sobrealimentar. También como los Bulldogs, los Pugs tienen hocicos cortos, fosas nasales ceñidas y un paladar blando y alargado, lo cual hace que la respiración sea dificultosa incluso para un Pug con un peso saludable. Debido a esta dificultad de respiración, los dueños del Pug necesitan limitar el ejercicio de sus perros con el fin de mantenerlos a salvo y saludables. Obviamente, esto hace que ayudar a un Pug con sobrepeso sea muy difícil. La mejor defensa contra la obesidad del Pug es evitar que se produzca en primer lugar, por lo que se debe controlar la ingesta de calorías.

10. Rottweiler.

Los Rottweilers son una raza grande que ganan peso fácilmente. Algunas personas tratan activamente de criar estos perros a ser más grandes, porque quieren que su mascota sea intimidante. Pero eso es una mala idea, porque al igual que los Boxers, los Rottweilers son propensos al hipotiroidismo, y al igual que los Pastores Alemanes, a menudo desarrollan displasia de codo y displasia de cadera. Afortunadamente, esta raza absorbe y utiliza su grasa según la cantidad de actividad física que le des.

lunes, 13 de octubre de 2014

El juego de los cinco minutos



Hace poco me hablaban de una aplicación de móvil que te indica ejercicios de gimnasia –gimnasia sueca podríamos decir- de forma que en siete minutos al día completas una tabla con la que dejas ejercitados prácticamente todos los músculos.

Bueno, algo parecido deberíamos hacer con nuestro perro, no sé si cinco o siete minutos; en todo caso un rato concreto y no muy largo.

Si todos los días dedicamos esos pocos minutos a entrenar a nuestro perro, enseñándole nuevas conductas o repasando las ya conocidas, sin un aparente gran esfuerzo podríamos tener a un verdadero ciudadano canino.

La gracia está en saber mejorar cada conducta. Es decir, para asegurar una respuesta muy fiable del perro y para posibilitarla en diferentes escenarios físicos o situaciones emocionales del perro, deberíamos prever esas variables y entrenar con ellas. 

Así, por ejemplo enseñándole a sentarse nos interesa no sólo que se siente cuando lo digamos, sino entrenar que ese estar sentado dure más  tiempo, o que se produzca aun cuando haya un ruido fuerte, o pase alguien corriendo, o en distintos tipos de superficie, o cuando el perro está motivado por otra cosa….por eso esos cinco minutos pueden practicarse  aprovechando que estamos en distintos lugares por la calle, en un parque, aprovechando situaciones nuevas…

No se trata de hacer de nuestro perro una estrella del cine.  Pero en esos cinco minutos le podemos enseñar además nuevas cosas: además del sentarse, tumbarse, coger, dejar, mirarnos, venir, etc, podemos ir practicando nuevos trucos: buscar, ladrar, callarse, hacer el muerto, etc... lo que queramos.

lunes, 6 de octubre de 2014

Una de las razas de perros más populares del siglo XXI: el bulldog francés o frenchie



El perro de las familias que no quieren mucho lío, más bien sedentarias y de ciudad: el frenchie o bulldog francés; uno de los perros más populares en el siglo XXI

Hay muchas personas que querrían tener un perro, pero que no lo tienen porque saben que les va a dar más guerra que otra cosa. Si lo tuvieran, -razonan-, tendrían la casa llena de pelos, molestarían a los vecinos con los ladridos del perro, olería todo a perro, y tendrían que darse grandes caminatas para pasearlo….

Bueno, es verdad que si tienes perro, tienes que saber que esas cosas pasan, solo que hay razas que pueden minimizar enormemente esos puntos negativos y van a darte con creces un montón de ventajas y beneficios.

El frenchie es el perro ideal para gran parte de estas personas. Es un perro de tamaño pequeño y de pelo corto, por lo que exige muy pocos cuidados. Se minimizan por tanto las molestias de espacio, olores, pelos….

Además es muy poco ladrador.

Es un perro entrañable, muy apegado a su dueño, cariñoso y juguetón. Necesita sus paseos diarios, pero no es un gran paseador. No requiere grandes distancias. Tiene un nivel de energía más bien bajo. Se lleva bien con los niños y con otras mascotas. Es atento y buen guardián. No es conveniente dejarle mucho tiempo solo.

Por todo ello se ha hecho un hueco en miles de hogares, hasta el punto de ser uno de los perros más populares en el s. XXI


También hay que saber que es inteligente pero también testarudo. Mejor en climas más fresquitos que en los calurosos, donde lo pasa peor.