El Canicross es una disciplina que se está consolidando en nuestro país y con una larga tradición en Europa, consiste en correr con un perro atado a la cintura con un cinturón y una línea de tiro que va hasta el arnés del perro. Habitualmente se practica sobre tierra, aunque de forma ocasional se puede practicar sobre nieve, corriendo este caso con raquetas si es nieve blanda o con zapatillas si es dura.
El Canicross fue introducido en España hace aproximadamente 10 años, en las competiciones regulares. A nivel federativo, depende de la Federación de Deportes de Invierno. En toda Europa el Canicross cuenta con mucha afición, existiendo una Federación propia con importantes campeonatos dedicados exclusivamente a esta modalidad y con un nivel competitivo altísimo.
El binomio hombre-perro hace especialmente atractiva esta práctica deportiva. Disfrutar de la naturaleza en compañía de un buen amigo y descubrir una afición en común con él, la pasión por correr, aportan un valor añadido a los aficionados al mundo de las carreras de montaña y a la vez amigos de los animales.
Para practicarlo sólo necesitas un arnés especial de tiro para el perro, no siendo válido los arneses de paseo, una línea de tiro con amortiguador y un cinturón de canicross que será ancho para proteger la espalda del corredor de los tirones del perro.
Precauciones especiales para la práctica del canicross
En el canicross el corredor debe de pensar en su compañero de entrenamiento tanto como en él mismo. No olvidemos, que el perro es un animal tan fiel que en ocasiones puede llegar a extremos físicos que le pueden perjudicar seriamente por el simple hecho de seguir corriendo junto a su amo. Al igual que el corredor debería pasar un reconocimiento médico, nuestro compañero debería pasar por el veterinario para comprobar su estado físico y descartar posibles anomalías. Una vez que empecemos a entrenar, los mismos principios que rigen la mejora física humana son aplicables al perro. No podemos empezar corriendo el primer día 20 km. porque nuestro perro acabará desfallecido. Debemos seguir los mismos principios de progresión que aplicamos con nosotros. Especial precaución debemos tener con la temperatura. Los efectos de las altas temperaturas, y en el caso del perro hablamos de más de 20º, pueden llegar a ser fatales. Debemos, por tanto, evitar a toda costa correr con más de 20º (las competiciones no se realizan a partir de este punto) para evitar problemas mayores. | |
Otro factor importante a tener en cuenta, es la edad del animal. A nivel competitivo es necesario que tenga un año y a nivel de entrenamiento aunque se puede empezar a correr, dos o tres meses antes, siempre se hará sobre distancias muy cortas y ritmos lentos. El objetivo en esta fase es que nuestro amigo se vaya habituando a correr con nosotros y coja el gusto por la carrera.
También es importante, correr con el equipo adecuado, especialmente el arnés del perro que evita rozaduras y distribuye el esfuerzo a lo largo de la espalda del animal, como el cinturón para el guía, para evitar presiones innecesarias en la espalda.
¿Qué perro es el adecuado?
En principio, cualquier perro sano con más de 1 año es válido para practicar canicross, tanto en entrenamiento como en competición, con independencia de su tamaño o raza. No obstante, lo habitual son perros de tamaño medio-grande, de entre 20 y 35 kg., puesto que de esta manera podremos aprovechar realmente las ventajas de correr tirado por el perro.
No obstante, si tuviéramos que elegir los perros más cualificados para competir, tendríamos que elegir los perros de caza de tamaño grande, como pueden ser bracos, que combinan resistencia, con una velocidad inigualable. Otros perros, que compiten a un buen nivel son los perros nórdicos, con preferencia por el Husky Siberiano o mezclas de esta raza.
Competiciones
Las carreras de canicross se disputan por tierra y son muy similares a las carreras de montaña, aunque la distancia es menor (de 5 a 10 km. habitualmente) y tienen menores desniveles. Las clasificaciones son las habituales en cualquier carrera popular (por edad y sexo).
En estas pruebas, el respeto al perro debe ser máximo y está totalmente prohibido que el perro corra detrás del guía, dar tirones y por supuesto cualquier tipo de maltrato físico o verbal al perro, siendo sancionado el corredor que lo incumpla.
Además, antes de empezar la carrera, se debe pasar un control veterinario donde se acredita que el animal tiene en regla sus vacunaciones y que se encuentra es un estado adecuado para participar, siendo la edad mínima de 1 año y se le marca al perro, para evitar cambios de última hora.
Hay dos tipos de salidas: Las salidas en grupo, que son las que se realizan en la Liga Nacional de Canicross y las salidas por tiempos, mediando unos segundos entre corredores. En las salidas en grupo, hay que tener especial atención y llevar al perro recogido con la línea de tiro, porque los perros al igual que los corredores están nerviosos y 50 perros de distintos tamaños, que son los habituales en este tipo de prueba, pueden generar algún incidente si no estamos atentos, pero son sin duda las más espectaculares.
Al igual que con los guías, curiosamente es en competición cuando el perro da lo mejor de sí. El estar rodeado de 50 ó 60 perros más, hace que ese día corra como nunca.
Otro punto importante, es la fuerte participación de mujeres en las carreras de canicross, con unos porcentajes más altos de los habituales en otro tipo de carreras.
Sensaciones al correr
Las sensaciones que se tienen al correr tirado por un perro son muy diferentes a las que habitualmente se experimenta sin perro. Aunque en bajada, se deben extremar las precauciones, puesto que un animal de 25 ó 30 kilos tiene una fuerza tremenda y podemos acabar rodando, en llanos y en subida es cuando experimentamos realmente el aporte de fuerza extra que nos da, eso sí, cuando quiere tirar, que no siempre pasa.
A las sensaciones físicas, debemos añadir las puramente “espirituales”, si el correr, en sí mismo supone un disfrute muy especial para cualquier corredor, hacerlo en compañía de tu perro le añade un toque muy especial, creando un vinculo muy fuerte entre ambos. Además de ser una motivación extra para salir a entrenar esos días que no apetece tanto. En cuanto el perro te ve con las zapatillas ya no se despega de ti y al final te acaba contagiando la energía.
Técnica de carrera
El hecho de correr atados por un perro, hace que la técnica de carrera sea diferente a correr sin perro. En el canicross se debe de trabajar mucho la flexibilidad y la técnica de carrera para optimizar el empuje extra del perro, a la vez que procuramos lastrarle lo menos posible a través de una zancada más ágil que la habitual. También se debe trabajar la parte superior a través de la musculación puesto que en ocasiones tenemos que controlar al perro y una vez que va lanzado esto requiere algo de fuerza. También debemos hacer especial hincapié en fortalecer nuestros tobillos y sobre todo nuestras rodillas, que sufren mucho al intentar frenar al perro, especialmente en las bajadas.
En competición, debemos además conocer las cualidades físicas y la psicología de nuestro compañero, para conocer sus motivaciones y quedarnos detras de otro corredor, si sabemos que nuestro compañero de equipo se va a motivar siguiendo a otro perro o adelantar en el caso de encontrarnos fuertes para hacer un cambio de ritmo, esta circunstancia debemos entrenarla antes para que nuestro perro tenga una motivación especial y no dependa de la presencia de otro perro para ir delante de nosotros.
Conclusiones
El Canicross es un deporte joven, que combina como ninguno la pasión de correr por la montaña, con el disfrute con los animales. Cada año se va consolidando más a nivel nacional y hay más organizadores que se animan a incluir a esta espectacular disciplina dentro de sus pruebas.
Agradecimiento: a Enrique Solís (www.lealcan.com), y grupo de canicross Lealcan, por permirtirme publicar este artículo.