El perro de agua español es una raza canina originaria de España, utilizada tradicionalmente como pastor, ayudante en barcos y en la caza. La raza fue reconocida por la Real Sociedad Canina de España en 1985 y por la Federación Cinológica Internacional en 1999. Existen diversas teorías sobre el origen de la raza. La más aceptada considera que es una raza arcaica introducida en Europa durante la invasión islámica de la península Ibérica iniciada en el año 711. Naturalmente entró por el sur estableciéndose en Andalucía donde procreó y se asentó en todo el territorio de Al-Ándalus. Varios siglos después a través de cañadas y vías fluviales llegó a otros países de Europa Occidental, donde probablemente se mezclaron formando grupos afines. Documentos que datan desde los siglos XIV, XVI y XVII, mencionan la presencia masiva de perros de agua español en Sevilla, su puerto en el río Guadalquivir y sus marismas. La distribución geográfica mayoritaria del perro de aguas español se centra tradicionalmente en Andalucía y Extremadura. Antes de su reconocimiento oficial como raza, estos perros han recibido diversos nombres según la zona. En Andalucía reciben el nombre de "perro turco andaluz" y en Extremadura "Churrino". Las funciones tradicionales del perro de agua español han sido la de perro pastor, cazador y ayudante de pescadores. Debido a su versatilidad es utilizado en múltiples labores campestres, urbanas y deportivas. Así, encontramos perros: careadores, pescadores, cazadores, de salvamento (unidades de bomberos), detección de drogas (Policía y Guardia Civil), detectando cebos envenenados (Guarda Forestal), de terapia, de trabajo, obediencia y agilidad y, en su mayoría como animales de compañía.
Imágenes:
No hay comentarios:
Publicar un comentario